Cuando menos lo esperas tu vida cambia por completo... Pasas de estar durmiendo en una almohada llena de rimel de todas esas noches que pasaste llorando a desear que no se acaben los días.
El tiempo me enseñó a que no merece la pena luchar por algo acabado , que cuando algo no merece la pena debo eliminarlo de mi vida porque cuando sea eliminado algo bueno ocupará ese lugar. El tiempo me enseñó a que cada uno tiene su lugar en el mundo... el tiempo nos pondrá en nuestro sitio.
Ya no me importa si lloré o no lloré, si sufrí o no sufrí, si me engañaste o no... no me importa... eso es pasado ya.
Ahora ni lloro ni sufro.. Ahora soy FELIZ.
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